martes, 30 de noviembre de 2010

Documento de UNASUR: Compromiso de democracia

Compromiso de democracia
PROTOCOLO ADICIONAL AL TRATADO CONSTITUTIVO DE UNASUR SOBRE COMPROMISO CON LA DEMOCRACIA
La República de Argentina, el Estado Plurinacional de Bolivia, la República Federativa del Brasil, la República de Chile, la República de Colombia, la República del Ecuador, la República Cooperativa de Guyana, la República del Paraguay, la República del Perú, República de Suriname, la República Oriental del Uruguay y la República Bolivariana de Venezuela.
CONSIDERANDO que el Tratado Constitutivo de la Unión de Naciones Suramericanas establece que la plena vigencia de las instituciones democráticas y el respeto irrestricto de los derechos humanos son condiciones esenciales para la construcción de un futuro común de paz y prosperidad económica y social y para el desarrollo de los procesos de integración entre los Estados Miembros.
SUBRAYANDO la importancia de la Declaración de Buenos Aires de 1 de octubre de 2010 y de los instrumentos regionales que afirman el compromiso democrático.
REITERANDO nuestro compromiso con la promoción, defensa y protección del orden democrático, del Estado de Derecho y sus instituciones, de los Derechos Humanos y las libertades fundamentales, incluyendo la libertad de opinión y de expresión, como condiciones esenciales e indispensables para el desarrollo de su proceso de integración, y requisito esencial para su participación en la UNASUR.
ACUERDAN:
ARTICULO 1
El presente Protocolo se aplicará en caso de ruptura o amenaza de ruptura del orden democrático, de una violación del orden constitucional o de cualquier situación que ponga en riesgo el legítimo ejercicio del poder y la vigencia de los valores y principios democráticos.
ARTICULO 2
Cuando se produzca una de las situaciones contempladas en el artículo anterior el Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno o, en su defecto, el Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores se reunirá –en sesión extraordinaria- convocado por la Presidencia Pro Tempore: de oficio, a solicitud del Estado afectado o a petición de otro Estado miembro de UNASUR.
ARTICULO 3
El Consejo de Jefas y Jefes de Estado o en su defecto el Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores, reunido en sesión extraordinaria considerará, de forma consensuada, la naturaleza y el alcance de las medidas a ser aplicadas, tomando en consideración las informaciones pertinentes recabadas sobre la base de lo establecido en el artículo 4º del presente Protocolo y respetando la soberanía e integridad territorial del Estado afectado.
ARTICULO 4
El Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno o, en su defecto, el Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores podrá establecer, en caso de ruptura o amenaza de ruptura del orden democrático, entre otras, las medidas que se detallan más adelante, destinadas a restablecer el proceso político institucional democrático. Dichas medidas, entrarán en vigencia en la fecha en que se adopte la respectiva decisión.
a.- Suspensión del derecho a participar en los distintos órganos, e instancias de la UNASUR, así como del goce de los derechos y beneficios conforme al Tratado Constitutivo de UNASUR. b.- Cierre parcial o total de las fronteras terrestres, incluyendo la suspensión y/o limitación del comercio, tráfico aéreo y marítimo, comunicaciones, provisión de energía, servicios y suministros. c.-Promover la suspensión del Estado afectado en el ámbito de otras organizaciones regionales e internacionales. d.- Promover, ante terceros países y/o bloques regionales, la suspensión de los derechos y/o beneficios del Estado afectado, derivados de los acuerdos de cooperación de los que fuera parte. e. Adopción de sanciones políticas y diplomáticas adicionales.
ARTICULO 5
Conjuntamente con la adopción de las medidas señaladas en el artículo 4º el Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno, o en su defecto, el Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores interpondrán sus buenos oficios y realizarán gestiones diplomáticas para promover el restablecimiento de la democracia en el país afectado. Dichas acciones se llevarán a cabo en coordinación con las que se realicen en aplicación de otros instrumentos internacionales, sobre la defensa de la democracia.
ARTICULO 6
Cuando el gobierno constitucional de un Estado miembro considere que exista una amenaza de ruptura o alteración del orden democrático que lo afecte gravemente, podrá recurrir al Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno o al Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores, a través de la Presidencia Pro Tempore y/o de la Secretaría General, a fin de dar a conocer la situación y requerir acciones concretas concertadas de cooperación y el pronunciamiento de UNASUR para la defensa y preservación de su institucionalidad democrática.
ARTICULO 7
Las medidas a que se refiere el artículo 4º aplicadas al Estado Miembro afectado, cesarán a partir de la fecha de comunicación a tal Estado del acuerdo de los Estados que adoptaron tales medidas, una vez verificado el pleno restablecimiento del orden democrático constitucional.
ARTICULO 8
El presente Protocolo forma parte integrante del Tratado Constitutivo de UNASUR.
El presente Protocolo entrará en vigor treinta días después de la fecha de recepción del noveno instrumento de su ratificación.
Los instrumentos de ratificación serán depositados ante el Gobierno de la República del Ecuador, que comunicará la fecha de depósito a los demás Estados Miembros, así como la fecha de entrada en vigor del presente Protocolo.
Para el Estado Miembro que ratifique el presente Protocolo luego de haber sido depositado el noveno instrumento de ratificación, el mismo entrará en vigencia treinta días después de la fecha en que tal Estado Miembro haya depositado su instrumento de ratificación.
ARTICULO 9
El presente Protocolo será registrado ante la Secretaría de la Organización de las Naciones Unidas.
Suscrito en la ciudad de Georgetown, República Cooperativa de Guyana, a los veintiséis días del mes de noviembre del año dos mil diez, en originales en los idiomas español, inglés, neerlandés y portugués, siendo los cuatro igualmente auténticos.

sábado, 27 de noviembre de 2010

“Fue un constructor de nuevos paradigmas”

LOS PRESIDENTES DE LA UNASUR RECORDARON CON UN EMOTIVO HOMENAJE A NESTOR KIRCHNER, PRIMER SECRETARIO GENERAL DEL BLOQUE

En la primera cumbre desde su fallecimiento, los presidentes de la Unasur recordaron el compromiso de Kirchner con la región. Hablaron Correa, Lula, el anfitrión Jagdeo y Cristina. Se postergó la elección de su sucesor en la secretaría.

“Fue un gran constructor de nuevos paradigmas en Sudamérica”, aseguró Cristina Kirchner ante sus pares de todo el continente, que, con su sola presencia, le daban la razón. Es que el desarrollo de la Unasur se debe –entre otros factores– al trabajo que Néstor Kirchner llevó adelante en la región. En eso coincidieron los oradores que, durante la IV Cumbre de jefes de Estado que se realizó ayer en Guyana, homenajearon a quien fue el primer secretario general de ese organismo. Además de las palabras de cariño y reconocimiento al ex presidente y a Cristina Kirchner por parte del ecuatoriano Rafael Correa, del brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y del anfitrión Bharrat Jagdeo, el bloque aprobó una declaración en honor del santacruceño y se anunció que el edificio donde funcionará de forma permanente la secretaría general del bloque, que se inaugurará el año que viene, llevará su nombre. También hubo un firme compromiso por parte de todos los países de continuar en la misma senda que el santacruceño le imprimió al bloque.
“Los sueños de él eran los sueños de todos los sudamericanos”, aseguró Lula, quien trabajó codo a codo con Kirchner en la génesis de este bloque. El brasileño –visiblemente emocionado– destacó, durante su despedida del órgano regional que el ex presidente argentino “supo enfrentar sin miedo el desafío de ser el primer secretario” de la Unasur, tarea que asumió pocos meses antes de su muerte, pero en los que pudo imponer su estilo y llevar a buen puerto situaciones de extrema delicadeza, como el conflicto entre Colombia y Venezuela o el golpe de Estado, fallido, en Ecuador. “Su figura quedará para siempre registrada en nuestra memoria como una fuente de inspiración. Es preciso honrar su memoria y no olvidar que su sueño es el de todos los sudamericanos”, concluyó.
Un rato antes fue el ecuatoriano Rafael Correa quien, al dar comienzo a la sesión, pidió para el “entrañable amigo y querido compañero” un minuto de silencio –tal como sucedió con todas las reuniones preliminares, que se llevaron a cabo el jueves– que fue coronado por aplausos. Durante su intervención, en la que repasó los avances logrados por el bloque en el último año, el presidente saliente de la Unasur aseguró también que Kirchner “sigue tallando con su espíritu” el futuro de la región. El discurso de homenaje propiamente dicho quedó a cargo del mandatario local Bharrat Jagdeo, una situación algo extraña porque se trataba de uno de los que menos conocían al ex secretario general entre los asistentes a la reunión, algo que él mismo se encargó de aclarar.
El guyanés recordó que conoció a Kirchner durante la Cumbre de las Américas de Mar del Plata, en 2005, cuando “bajo su dirección nació la idea de que podía lograrse algo distinto” al Consenso de Washington, que fue enterrado, junto al proyecto del ALCA, en esa ocasión. Kirchner “nació con el don de la destreza política”, agregó Jagdeo y mencionó que “cientos de miles se acercaron a despedirlo” dejando en claro “que fue profundamente amado y respetado por su pueblo”. Finalmente, aseguró que si bien “su muerte ha sido muy difícil de aceptar para muchos que continuarán lamentando su pérdida, el mejor homenaje es redoblar esfuerzos para lograr una Sudamérica unida”.
Cuando le tocó hablar a Cristina, de negro riguroso, destacó que Kirchner “se abocó a una tarea de derribar tabúes y preconceptos respecto de las cosas que nos dijeron que no se podían hacer y que él pudo llevar adelante”. La Presidenta fue breve para evitar quebrarse, pero se preocupó por agradecer a sus pares por sus palabras y por la tarea que cumplieron junto a su esposo. Dirigiéndose a Lula le agradeció que, juntos, hayan podido “tirar abajo el tabú del enfrentamiento entre Argentina y Brasil por falsos liderazgos” en la región. Al venezolano Hugo Chávez le agradeció la ayuda brindada a la Argentina “cuando nadie la ayudaba por defaultear su deuda soberana y el mundo le daba la espalda”.
Otro tema que sobrevoló la reunión fue el de la sucesión. Tal como anticipó Página/12, ninguno de los nombres que se barajan de manera extraoficial para ocupar la secretaría general de la Unasur terminan de convencer a los presidentes. “Es un tema que requiere tiempo y análisis, por lo que seguirá siendo tratado la semana que viene”, informó a este diario el canciller Héctor Timerman. Con esa finalidad, se decidió convocar a una reunión extraordinaria de jefes de Estado de la Unasur, que se llevará a cabo de forma paralela a la Cumbre Iberoamericana convocada para el viernes y el sábado próximos en Mar del Plata.
Por la delicadeza del asunto, no se espera que se arribe de forma inmediata a una solución, sino que se buscará delinear un perfil “con ciertas características”, en base al que se buscará al postulante indicado. Aunque originalmente la idea era que se tratara de un ex presidente de la región para mantener alto el perfil del bloque, las declinaciones al ofrecimiento por parte de Lula y de la chilena Michelle Bachelet, sumado a que ningún otro de los nombres propuestos (el uruguayo Tabaré Vázquez o el chileno Ricardo Lagos) genera consenso total en el bloque, lleva a que se abra el juego a otros actores.
Según pudo averiguar este diario, en ese sentido fue sondeado el asesor en política internacional de Lula, Marco Aurelio García, que habría declinado para mantener su rol en el nuevo gabinete de la presidenta electa Dilma Rousseff. La semana que viene, algunos sectores propondrían como solución que Argentina designe a un reemplazante que cumpla lo que resta de los dos años de mandato que se le dieron a Néstor Kirchner, aunque lo más probable es que no haya definiciones hasta dentro de seis meses, cuando se lleve a cabo la próxima cumbre ordinaria.
El dato relevante de la jornada fue que la Unasur decidió, por unanimidad, bautizar la futura sede permanente de la secretaría del organismo con el nombre de Néstor Kirchner “en reconocimiento a su lucha incansable por el bienestar y el progreso no sólo de la Nación argentina sino de la región sudamericana”, tal como se explicó en un comunicado. El edificio, diseñado por el arquitecto ecuatoriano Guayasamín, se levantará en los próximos meses en Mitad del Mundo, una localidad cercana a Quito
Por Nicolás Lantos

domingo, 21 de noviembre de 2010

Día de la Soberanía

En la mañana del 20 de noviembre de 1845 pudieron divisarse claramente las siluetas de cientos de barcos. El puerto de Buenos Aires fue bloqueado nuevamente, esta vez por las dos flotas más poderosas del mundo, la francesa y la inglesa, históricas enemigas que debutaban como aliadas, como no podía ser de otra manera, en estas tierras.
La precaria defensa argentina estaba armada según el ingenio criollo. Tres enormes cadenas atravesaban el imponente Paraná de costa a costa, sostenidas en 24 barquitos, diez de ellos cargados de explosivos. Detrás de todo el dispositivo, esperaba heroicamente a la flota más poderosa del mundo una goleta nacional.
Aquella mañana, el general Lucio N. Mansilla, cuñado de Rosas y padre del genial escritor Lucio Víctor, arengó a las tropas: “¡Vedlos, camaradas, allí los tenéis! Considerad el tamaño del insulto que vienen haciendo a la soberanía de nuestra Patria, al navegar las aguas de un río que corre por el territorio de nuestra República, sin más título que la fuerza con que se creen poderosos. ¡Pero se engañan esos miserables, aquí no lo serán! Tremole el pabellón azul y blanco y muramos todos antes que verlo bajar de donde flamea.”
Mientras las fanfarrias todavía tocaban las estrofas del Himno, desde las barrancas del Paraná, nuestras baterías abrieron fuego sobre el enemigo. La lucha, claramente desigual, duró varias horas hasta que por la tarde la flota franco inglesa desembarcó y se apoderó de las baterías. La escuadra invasora pudo cortar las cadenas y continuar su viaje hacia el norte. En la acción de la Vuelta de Obligado murieron 250 argentinos y medio centenar de invasores europeos.
Pero tres años más tarde, los bloqueadores se ven obligados a firmar la Convención Arana-Southern, que se selló el 24 de noviembre de 1849. El gobierno inglés se obligaba a “evacuar la isla de Martín García”. Por el artículo 4º, el gobierno de su Majestad reconocía “ser la navegación del Río Paraná una navegación interior de la Confederación Argentina y sujeta solamente a sus leyes y reglamentos, lo mismo que la del Río Uruguay en común con el Estado Oriental”. Hoy, la defensa de la soberanía pasa por profundizar el modelo industrial productivo inclusivo, libre de ataduras a las recetas, y los modelos de los llamados generosamente “organismos multilaterales de crédito”, que lo son en realidad de la usura, el atraso y la regresión en políticas sociales, fiscales y salariales.
Por Felipe Pigna
Historiador

domingo, 14 de noviembre de 2010

Nuevos aires, nuevo aliento

Nuevos aires, nuevo aliento
La pérdida de un gran líder parace irreparable. Pero, a diferencia de lo que muchos pensaban, Néstor, y todo lo que representa, volvió a nacer. Con la potencia de un huracán: Néstor Vive, y no sólo en los afiches que empapelaron las ciudades.

¡Cuando un pueblo enérgico y viril llora, la injusticia tiembla!
Fidel Castro

Soplan otros vientos. Son tiempos de cambio. Hay nuevos relatos que circulan, se entretejen y se mezclan entre la gente. Otras miradas. Nuevas maneras. Más claridad. Con la muerte de Néstor algo cambió. Y va más allá de las intenciones de voto para 2011. Es algo que se percibe en el aire. El dolor impactó fuerte. La pérdida de un gran líder parece irreparable. Pero, a diferencia de lo que muchos pensaban, Néstor, y todo lo que representa, volvió a nacer. Con la potencia de un huracán: Néstor Vive, y no sólo en los afiches conmovedores que empapelaron las ciudades, o en las fotos elegidas para homenajearlo. Vive en cada uno de sus actos. En su obra. En su legado.
La calle se llenó de agradecimientos. La juventud dijo presente. Miles y miles de ciudadanos comunes sintieron la necesidad de manifestarse. De darle un último adiós. Muchos lloramos ese día y los que siguieron. Pero nada puede detener este proceso. Esta profunda sensación de que la Argentina está cambiada. Más madura. El prado se llenó de flores y, a partir de aquel 27 de octubre, nada volverá a ser igual. Las mentiras se desintegran. Las caretas se convierten en polvo. La verdad irrumpe desfachatada, tirando por la borda todas las construcciones mediáticas que nos intentan confundir. Porque la realidad es cocora; amaga con quedarse callada, pero es impredecible. Y de repente se hace visible, corpórea. ¿Dónde estaba toda esta gente para los medios despiadados? ¿En qué oscura zona los querían ocultar? ¿A quién le hablan cuando dicen que el pueblo no quiere este modelo de país?
Le desearon tanto la muerte tanto... y tantos. De todas las formas, de todos los colores. Irrespetuosos y ajenos a la metamorfosis que venimos percibiendo, desde la llegada de Néstor, y que hoy Cristina continúa profundizando. Ajenos a todo. Infames mentirosos. Embusteros. Nos quisieron contar otro cuento. Nos invadieron con pesimismo. Nunca imaginaron que un día llegaría un gobierno diferente. Que un día muchos, que nunca habíamos sentido ganas de ser parte, nos íbamos a involucrar. Pretendían que no pensáramos, que no cuestionáramos, que nos olvidemos. Para que los próximos que gobiernen lo hagan para ellos. Extrañan las políticas corruptas, donde los “nobles” empresarios evaden impuestos y compran leyes. Donde los patrones del campo se siguen llenando los bolsillos a costa de los peones, y los precios surrealistas que imponen en el mercado. Pero le pifiaron a la pelota, ¿no, muchachos? ¿Que pasó? No se la vieron venir. ¿Y ahora? ¿De qué se van a disfrazar? Por si no lo entendieron, lo repetimos: “Noticia de último momento. Somos muchos más los que estamos dispuestos a seguir este camino que Néstor supo alumbrar.”
Porque ahora muchos que eran bastante críticos de esta gestión pudieron ver más allá de las diferencias. Pudieron ver todos los logros y avances de los últimos siete años. Porque la movilización fue espontánea. Sin incidentes como hubieran querido. En paz. Por el simple hecho de mostrarle apoyo a la presidenta y al modelo de país que el gobierno impulsa.
Porque cada día la actualidad se encarga de mostrarnos el contraste entre esta forma de hacer política con el pueblo y para el pueblo, que desde 2003 propuso Néstor y Cristina sigue llevando adelante, en oposición a las formas que adoptan los representantes de intereses corporativos, los que nos oprimieron casi sin interrupción desde mediados de los ’70 con la dictadura y continuaron con el neoliberalismo de los ’90. Muchos de los personajes que hoy conforman la vergonzosa oposición. Muchos de los que hoy se sientan en sus bancas para entorpecer, como sea, el avance de políticas que estimulan el crecimiento de nuestra nación. Y adivinen por qué lo hacen. Sí, se ganaron un té canasta con Lilita Carrió, para tejer realidades siniestras. Lo hacen porque si las cosas marchan mejor, y la gente está contenta, a ellos no los vota ni su madre, y el sueño de volver a ser gobierno se diluye. Ahora varios del Grupo A se deben estar retorciendo. Porque ni con la ayuda del diario más vendido del país logran despegar. Se matan entre ellos. De afuera, se los ve tan graciosos. Como un grotesco subido de tono.
Por estos días, la atención mediática se centra en torno al presupuesto. No saben qué hacer porque se acerca 2011 y no pueden rescatar una sola figura. Y están haciendo lo imposible para condicionar la gestión del año que viene.
Mientras tanto, de este otro lado se vive el acercamiento, el encuentro, la reunión. Ahí estamos los miles que fuimos a la Plaza a despedir a Néstor: hombres y mujeres de distintas edades, creencias, orientaciones sexuales e ideas políticas. De distintos lugares de la Argentina y con banderas de países vecinos. Personas con largas historias de militancia y jóvenes contagiados de un nuevo fervor. Trabajadores de distintos rubros. Artistas e intelectuales con diferentes filosofías. Y también quienes no vinieron pero lo sintieron. Los que después se dieron cuenta de lo importante de la pérdida. Los que hoy charlan y piensan que, más allá de simpatías y personalidades, el país cambió mucho, y positivamente. Millones que de una u otra forma bancamos este modelo: algo que la oposición y los intereses concentrados no pueden aceptar.
Y ahí tenemos a De la Rúa sobreseído. Y los responsables políticos de las muertes de diciembre de 2001 siguen impunes. Así como continúan impunes los autores intelectuales de los asesinatos de Kostecki y Santillán. Porque en nuestra justicia quedan muchos resabios de las épocas de represión, y muchas figuras oscuras siguen vigentes. Son los que colaboran para que Macri desa-loje a familias pobres para facilitar negocios inmobiliarios. Y como no les alcanza con dejarlos en la calle los mandan a la cárcel, y el reclamo por el derecho a la vivienda se convierte en un crimen. Y ahí se vuelve evidente cómo las políticas de ajuste criminalizan las protestas. Y hasta qué punto es importante la decisión política de no reprimir los reclamos populares: por el contrario, atenderlos y buscarles solución.
Así tenemos de un lado a los que homenajean la muerte de Massera, los que reivindican la dictadura (como el diario La Nueva Provincia, de Bahía Blanca), los que siguen apañando a genocidas, los que insisten en “no revolver el pasado”, los que todavía tienen muertos en el ropero. Los que, como Bergoglio, cada vez más embarrados, se niegan a aceptar la responsabilidad y complicidad de instituciones civiles y religiosas en el golpe del ’76. Y el monopolio que no sabe qué más hacer para ocultar sus relaciones con los gobiernos de facto.
Y de este lado los que seguimos en las luchas por la memoria, la verdad y la justicia. Para que no quede ni un represor libre, ni un nieto apropiado. Ahí se evidencia la importancia del apoyo que esta gestión viene brindando a la lucha de Madres y Abuelas. Porque esto no es revancha: es vital para nuestro presente y nuestro futuro que los asesinos, torturadores y apropiadores estén en prisión. Y seguir sabiendo quién es quién en nuestra democracia, y quiénes se siguen llenando la boca hablando de libertad con las manos manchadas de sangre.
Por suerte de este lado, cada vez somos más los que tenemos los ojos bien abiertos. Los que estamos conversando y compartiendo distintas visiones. Los que estamos dispuestos a estrechar las manos de afines. Los que no vamos a permitir que el país vaya para atrás, porque nos queda mucho, muchísimo por delante. La Argentina se puso de pie. Nuestros países hermanos también. La libertad tiene un precio. Hay que pelearla, hay que ganarla. Pero el proceso está en marcha. Y no van a poder detenerlo. Fuerza, Cristina. Acá está el pueblo que te banca. No aflojemos, “Flaca”, que esto recién empieza.

Florencia Peña
Publicado el 14 de Noviembre de 2010, Tiempo Argentino

domingo, 7 de noviembre de 2010

Kirchnerismo

¿La etapa superior del peronismo?

La transversalidad tiene la oportunidad histórica de retomar y profundizar la mística del 17 de octubre de 1945, con la incorporación de una multitud de actores que de simples espectadores se podrían convertir en sujetos de transformación.
Desde que en octubre de 1943, el coronel Juan Perón solicitó desempeñarse en el Departamento Nacional del Trabajo, un modesto organismo dedicado a los asuntos laborales y sindicales, la vida del hasta ese entonces ministro de Guerra tuvo un giro inesperado. Convirtió al modesto organismo en Secretaría de Trabajo y Previsión, ampliando sus facultades y abriendose una etapa inédita en la relación del Estado con el movimiento obrero. Desde allí impulsó la organización de los trabajadores en sindicatos, transmitiéndo a los asalariados una visión reivindicatoria y promoviendo una legislación protectora inspirada en los principios de justicia social.
Por primera vez desde un organismo estatal se planteó el trabajo en común con las organizaciones de trabajadores. Hasta su aparición en el escenario político, las organizaciones obreras se agrupaban según sus convicciones ideológicas en comunistas, sindicalistas y anarquistas. Desde finales del siglo XIX, el accionar de los aparatos del Estado operaba con la mira puesta en el debilitamiento de las organizaciones obreras y en situaciones álgidas no vacilaban en la implementación de métodos coercitivos y el aniquilamiento físico del activismo. La llegada de Perón a la conducción del Departamento Nacional del Trabajo marcó un antes y un después en las políticas de gobierno con el mundo obrero. Esa fluida relación fue el embrión que sentó las bases de lo que luego de la histórica jornada del 17 de octubre de 1945, cristalizó en la inalterable fidelidad de las grandes mayorías con el ideario Peronista.
Desde la muerte de Juan Perón el 1 de julio de 1974, el devenir del movimiento peronista, dictadura civico-militar de por medio, nunca más logró retomar los días de esplendor y la impronta transformadora propia de los primeros gobiernos de Perón y Evita. Ante la derrota electoral del líder radical Raúl Alfonsín, los mariscales de la derrota encaramados en la cúpula justicialista tuvieron que dar su paso al costado. La renovación se convirtió en una suerte de aggiornamento light, que nunca pudo retomar la mística de las primeras épocas. Pero la llegada al sillón de Rivadavia del caudillo riojano con sus consignas nunca cumplidas como la Revolución Productiva y el Salariazo, condujo durante más de diez años a una alianza contranatura del justicialismo con el neoliberalismo económico. El desfondamiento político producido por Carlos Menem en las filas del peronismo fue el peor golpe en cinco décadas de historia del movimiento. Si bien se podría caracterizar que el movimiento ideado y gestado por Juan Perón siempre estuvo conformado por un extenso abanico de tendencias desde la derecha, a la base obrera fue propia de las corrientes de tradición de izquierda. El devenir pendular del accionar político del viejo líder fue siempre una característica propia según plantea  en su exhaustiva obra el politólogo Laclau, en la génesis de los movimientos populistas en el mundo. Poder encontrar equivalencias entre los efectos de la Década Infame, iniciada con el golpe de Uriburu, y seguida por la presidencia de Justo a la década de los ’90 del Menemato y el continuismo del gobierno de De la Rúa, nos permitiría entender la hipótesis central de este corto escrito. Los efectos catastróficos en las condiciones de vida de las mayorías puede ser uno de los elementos a medir. La crisis de los partidos políticos y su dependencia de las corporaciones económicas es otro dato similiar, y el vacío existente en el universo de la representación completaría el trípode de equivalencias entre ambas coyunturas históricas. Con el agravante que la crisis de diciembre de 2001 vino acompañada por una profunda insubordinación de masas, compuesta por un diverso conglomerado de singularidades afectadas que tomaron las calles no sólo para expresar su descontento, sino para exigir cambios. De ese acontecimiento en adelante nada fue igual en la Argentina y la sucesión de gobiernos fue un claro síntoma de la precariedad del establisment sobre el manejo de la gobernabilidad. En ese sentido, el asesinato de los jóvenes Kosteki y Santillán en Avellaneda en el invierno de 2002 por la policía brava de Eduardo Duhalde, y sus consecuencias políticas, marcaron los límites del poder para establecer sus agenda restauradora.
En esa profunda crisis de representación y ante la inexistencia de líderes con llegada al electorado, los comicios del otoño de 2003 marcaron la atomización de los dos partidos mayoritarios, quienes no pudieron concretar candidaturas unitarias. Y, en el caso del peronismo, se abrió un gran interrogante sobre sus posiblilidades de resurgimiento como partido de masas, ante el crecimiento vertiginoso de un nuevo fenómeno: los movimientos sociales, esencialmente conformados por la organización territorial de los trabajadores desocupados, además de la existencia de un ala conservadora con un piso electoral cercano al 25% .
La llegada con tan sólo el 22% de los votos al sillón de Rivadavia de un candidato poco conocido por la opinión pública, generó un gran interrogante sobre el devenir del nuevo gobierno. El padrinazgo de Eduardo Duhalde tampoco fue un elemento muy esperanzador para el ciudadano de a pie. Lo cierto es que según pasaron los días, las palabras como los hechos fueron demostrando que el flamante presidente no era el supuesto chirolita del Caudillo Bonaerense, y a diferencia de otros referentes de la política, fue un fiel intérprete del mensaje dado por la insubordinación de masas que expulsó al gobierno de De la Rua. Esa interpretación correcta del humor de la ciudadanía hizo definir en su agenda a su mandato como un antes y un después del festín neoliberal, que llevó a uno de cada dos argentinos a subsistir en las fronteras de la pobreza.
Una Argentina donde la distribución sea su norte y la producción el camino junto a la revolucionaria política de Derechos Humanos basada en dejar sin efecto las leyes de impunidad y retomar el ideario de las Madres y las Abuelas en base a los postulados de Memoria y Justicia, fueron ejes que en poco tiempo marcaron la frontera entre la partidocracia afín al consenso posdictatorial enquistado en las cúpulas de ambos partidos mayoritarios y su talante transformador.
La férrea convicción de no reprimir el conflicto social fue una decisión muy mal vista por el establishment y la corporación mediática, que comenzó junto a los partidos conservadores y de centroderecha a marcar su germen opositor. La elección de 2007 indicó el imparable crecimiento del kirchnerismo, y el triunfo de Cristina en primera vuelta marcó los índices de popularidad del proyecto. Pero en paralelo a este fenómeno,  empezó la consolidación –a diferencia del primer mandato de Néstor Kirchner–, de un conglomerado opositor que emergió con más nitidez con el tan publicitado conflicto de los propietarios agrarios y el descarado apoyo de la coorporación mediática. De ahí en más comienza otra película y la oposición no sólo se convierte en político mediática, sino que como caballo de Troya implosiona en el mismísimo seno del Ejecutivo. Lo cierto es que, a pesar del personaje que pasará a la historia por su insólito lugar de vicepresidente opositor, la idea de transversalidad sigue palpitando en las entrañas de la sociedad, y el acontecimiento multitudinario ante las exequias de Néstor Kirchner ameritan un análisis más profundo del carácter heterogéneo y policlasista de la incomensurable expresión de cariño popular.
El escenario contemporáneo, de la misma manera que la coyuntura política de mediados de 1940, ha necesitado de intérpretes que de la nada emergieron a la escena pública con una potencia y una voluntad de transformación poco corrientes. La muerte de Néstor Kirchner, –como afirmaba nuestro compañero Roberto Caballero en su editorial de los últimos días– “hace nacer el kirchnerismo”. Retomando sus palabras, yo  me pregunto en voz alta, si esta muerte no sólo será recordada por lo abrupta e inesperada, sino como el hecho fundante de un nuevo ideario transformador que como el peronismo originario, trasciende su núcleo gestor. La transversalidad o el desborde más allá del peronismo del ideario kirchnerista, tiene la oportunidad histórica de retomar y profundizar la mística del 17 de octubre de 1945, con la incorporación de una multitud de actores que de simples espectadores se podrían convertir en sujetos de transformación. Para eso se deberá contar con la grandeza de los históricos sectores del antiguo peronismo que supo construir Juan Perón, y tomar en cuenta los potenciales aliados del nuevo escenario ratificado con la multitud plebicitaria que arropó esas entrañables jornadas. Entender la impronta transformadora de esos nuevos sujetos y dar un lugar en su seno, será la clave de un futuro venturoso. Sin esa incorporación tan necesaria será complicado enfrentar a los enemigos del pueblo y profundizar cualquier proyecto de emancipación.
Jorge Muracciole Sociólogo, docente de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.
Publicado el 6 de Noviembre de 2010, Tiempo Argentino